miércoles, 23 de noviembre de 2011

Cajón para Toque, Cante y Baile.

Cajón para Toque, Cante y Baile

Siempre ha existido una clara distinción entre estas tres facetas del flamenco; antiguamente se hablaba de cantaores y guitarristas que “tocaban atrás” o bien los que “tocaban alante”, esto es así porque no es lo mismo un cantaor / ora para baile que uno/a “para alante” que más bien sería una figura.
Lo mismo ocurre con la guitarra ya que no es lo mismo el acompañamiento al baile o el cante que una guitarra solista.

En el caso del baile podemos decir que siempre es protagonista, no existe un baile de acompañamiento sino todo lo contrario; siempre que hay baile, hay que acompañarlo.
Hay, por tanto, dos claras facetas distinguibles en esto del acompañamiento: la de acompañar y la de ser acompañado.
En el cante y la guitarra esta muy claro cuando uno tiene que acompañar y cuando debe ser acompañado pero, ¿qué ocurre con el baile y la percusión?
Podríamos decir que se trata de dos extremos opuestos: el baile siempre es acompañado y la percusión siempre acompaña.

En resumidas cuentas, el cante, la guitarra y la percusión coinciden en que han de saber acompañar pero, también el cante y la guitarra, al igual que el baile, han de ser acompañados en otras ocasiones.
Lo miremos por donde lo miremos el cajón siempre ha de acompañar, pero ¿es lo mismo acompañar el toque, el cante o el baile?

Para responder a esta pregunta haré uso de los comentarios y experiencias de otros compañeros percusionistas y de mi experiencia personal como músico.


El toque. La guitarra y su juego de intensidades. Acompañar a un guitarrista es quizás lo más gratificante ya que nos permite tener mucha libertad a la hora de frasear, improvisar e incluso jugar con la rítmica haciendo cierras dobles, doblar el tiempo, hacer silencios en el compás... etc.
Pero no hay que dejar llevarse por la emoción ya que acompañar adecuadamente significa el dar unas bases rítmicas muy claras y “con fundamento” que faciliten el trabajo de este.
Lo más importante es escuchar mucho para poder responder al continuo juego de intensidades que puede llegar a ofrecernos un guitarrista. El toque de un flamenco no es un mar en calma sino que esta en continua marejada y otras veces con la mar gruesa.
Por último quiero destacar que otra de las características de acompañamiento al guitarrista es que puedes desarrollar toda tu musicalidad y la capacidad de matizar y detallar cada golpe garcías a la continua estimulación rítmica y armónica del toque.

El cante, la intuición Acompañar el cante es, al igual que en el toque, muy gratificante ya que te puedes permitir ciertas libertades.
La cualidad más importante del acompañamiento al cante es la capacidad de desarrollar el sentido más intuitivo que uno posea. Hay que dar un margen de libertad al cantaor muy grande y hacerle sentir cómodo para después adivinar donde hace un giro, un cierre inesperado... en conclusión pura intuición.
No te puedes recrear en el juego rítmico tanto como en el toque sino que más bien se trata de apoyar las entradas y salidas del cante así como los cierres. También ha que dar respuesta al juego de intensidades e incluso recrearse en los silencios y así resaltar el protagonismo del cantaor.
En cierto modo acompañar el cante implica acompañar también el toque.

El baile. La memoria. El acompañamiento al baile es la faceta más sacrificada de las tres porque aunque la intensidad, la musicalidad, la improvisación, intuición... etc., están presentes, no son estas las cualidades que caracterizan el acompañamiento al baile.
Es la parte del Flamenco que más estudio requiere ya que hay que conocer las estructuras típicas de cada baile para aprenderse posteriormente las adaptaciones que pueda hacer el bailaor / ora además de los cierres, los cortes, cambios de acentuación y las frases que se hacen junto con el taconeo.
Todo esto se traduce en que hay que memorizar muchas cosas por lo que nos encontramos mucho más limitados a la hora de expresarnos y el apoyo rítmico de una buena base al baile es realmente lo único imprescindible.

También hay que saber traspasar los momentos del baile al músico que en ese momento sea el principal, es decir, como dice mi compadre Diego Álvarez “ el Negro”:<< Hay que saber transportar el protagonismo en cada momento de un baile dándole preponderancia al toque, al cante o al baile según corresponda. >>
p.d.: hoy por hoy es una pena pero no se puede hablar de como se acompaña la percusión. "El Guille"


http://www.todocajon.com/content/cajon-para-toque-cante-y-baile

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